Uno ya no sabe si pasar tanto tiempo delante del ordenador acaba secándote el cerebro de manera inexorable. Y tampoco llega a explicarse como una herramienta de trabajo puede hacerte perder el tiempo de tan miserable modo. .
Empecé, confieso, siendo un friki de la Semana Santa. Ahora que soy el ex-procesionista de la semana el friki que habita en mi se encuentra vacío y trata de llenar mi pena creando este blog, que posiblemente no dure más de lo que tarde en olvidarme de él.
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Esto de ser ex-procesionista es un sentimiento intenso. Me evoca a cuando me dejó esa chica, de infausto recuerdo, dejando un hueco inmenso en una parte de mi alma que tardó muchos años en llenarse de nuevo.
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Es una sensación de abandono in-con-mensurable, que sólo se alivia volviendo al foro, de tapadillo, como cuando miraba sus fotos hasta que me cansé de ellas y las tiré al contenedor. Al mismo contenedor en el que, paradojas de la vida, ella había tirado algunos meses antes mis poemas de amor.
Qué gran verdad todo lo que dices, sanjota. Eres un gran tipo. Un abrazo muy fuerte. Tu amigo VSJ
ResponderEliminarHola amigo.
ResponderEliminarEso me pasó también a mi hace ya algunos-bastantes años. Llegué a ser mercenario de procesiones. Las viví intensamente e intensamente me llegaron a defraudar. Ahora, las sigo por mis hijos, para que puedan, si quieren, vivir esas emociones tan intensas. Pero he de reconocer que siento un regusto amargo.....y que me tocan los cojones estas fiestas.....
Fdo.: Balustrada.